malón cautivo






in memorian
Nestor Perlongher


¿adónde se sale cuando no se está?
¿adónde se está cuando no se sale?
N.P.

Estamos sitiados Bernadotte
Adónde iremos
después de esta película tan triste
N.P.


nuestras muertes perduran
somos sus muñecos
puestos en vereda por la autoridad del tiempo
no hay más tu tía ni hay más sudor que el sud
no queda otra
repetir y repetir a rajatabla:
en la superficie lo desconocido

el misterio es la forma visible
lo desconocido está en la piel
a la luz del más ciego
pero nuestra piel no huele bien
y es color aca
churrasco de carancho al vuelo todavía
esos somos: aca y roña:
carroña de carancho
en vuelo todavía

allá ellos dirán
son puro viento
pedos sin destino ni prosapia
van y dicen: los pusimo a poblar y se hacen humo
si uno no le ata un yugo a las berijas
pero guarda la tosca
la patagonia sopla
–asi según decía el chino:

esos tilingos pichones de prócer
que te junan desde el bronce sin apearse
como a una masa hedionda
pelandrunes de trajedia y tacorba
shushetas lamedores de orto
mojando baibiscuices restauradores
en el mismo mucílago
rojo punzó de los patrones
en la concha del padre

allá ellos dirán
se han vuelto vagos
chusma de malón y piquete
pasada de resero en tetrabrik
cha que dicen macanas los prohombres
nos hemos vuelto huincas porai
machos blandos quizá
mariconcitos
seferinos
milongueritos de quermés

cuando esos chupatintas en palique
nos echaron los perros
y los perros nos chuparon a golpes
a golpes de campaña desierta y soldadera
a golpes de alambrada
a golpes de coyunta y falcon verde:
(si hasta los pibes se chorearon)
no queda campo ni culo virgen

no hay adónde
lo sabía roca al levantar el yopin de pigué
ir y venir de secretaria a pinche de dotor
te jode los riñones
trasca si te trepan las ancas sementales de hule
la espera dura lunas y al fin
baldío con los ojos de vidrio
te cajonean prescrito en la fosa
común de los trámites

stocker compró campos al lado de la larga
los potros eyaculaban mate cocido
sobre holandos violeta de los alpes
con tetitas de chocolate blanco
todas clonadas

en esas fiestas patrias de doma y daca
el colorido era para alquilar balcones

por una de esas nos vimos otra vez
en la superficie viajaba de colado
como siempre el misterio

no hablamos español entre nosotros
esa es la gracia
desde el trabuque de aquellos días
todo quedó en barroso
hablamos mal según se dice
un cocoliche de cautiva
que va del sapucai de estaño
al lunfardo de los colchoneros

me acuerdo
fue la noche que le oí reperir
como si compusiera un coral de cancha:
la patagonia sopla paja
puta carajo
si es eso lo que somos
paja:
muñequitos de paja en el culo cagao del mundo

fue por los tiempos de los quichicientos peones:
hasta acá llegó calfucurá
y en cochicó pasaba los veranos
pastoreando progenie
desde tierra del fuego para acá
todo era pampa
¿qué pendeja de chiclana
no fue nieta de grasa de guanaco
y guasca e gaucho?

se amansaba al chamuyo y se cagaba al trote
nada de andar sobando la tropilla
oyendo el triste tintineo de la yegua madrina
dos o tres días locos bien vividos

hasta que esos mierdas nos echaron cabresto
a guampazos de bestias y ladridos
en secretas yerriadas fueron marcando todo
terneras fletes cuices liebres loros
y pa nosotros nada
¿te acordás milonguita?:
manada oscura de ariscos cabecita
charquiando sopa e cardo en las reservas

yo digo lo que digo porque estuve en san carlos
y los ví fileteando los tratados
después mandaron fruta subvertida
desobediencia y desacato
resistencia a la autoridad
actitud sanjalsina

nos corrieron hasta choele choel
y en trelew nos dieron como en bolsa
al chino lo lancearon de a cuatro
como churrasco e croto
que amenazaba el orden dijeron:
que portaba material antiamericano

el chino le daba al verso y a la vigüela
no vuelvas a pasar esta página o estás listo
dijo que le dijo el salado soplando esa mañana
(el agua me habla arriba y el viento abajo)
»de haber sabido que esto también es libro
no venía al boliche«
bromeó mientras se iba en sangre
hizo una pausa
como si no viera más a sus amigos sino moscas

entonces a coro con su sangre apurada
igual que el padre y el abuelo
profetizó con restos de cielo
con lo que le quedaba de aire:
el patagón sopla cabrero vomitando pitucos